Pintor español Alfonso Sánchez En 2022 recibió el 1º Premio Certamen Nacional de Pintura Sánchez Butrón. Menciones de honor en Premios de ámbito Nacional e Internacional. Artista seleccionado en la Bienal de Valencia 2023. Obra en importantes colecciones de España, Portugal, Francia, Bélgica, Holanda, Luxemburgo, Italia, Polonia, Grecia, Alemania, Reino Unido, Irlanda, Hungría, Finlandia, Croacia, EEUU, Dubai, Japón y Taiwán. Expresionismo lírico, basado en el color, la textura y la pincelada. Mi trabajo trata de conectar con el cerebro primitivo, trabajo con el gesto y la intuición. Puede seguir mi trabajo en mi perfil de Instagram: https://www.instagram.com/alfonso.sanchez.art/ La obra se entrega sin bastidor (embalaje profesional, enrollada en un tubo). Las medidas indicadas son las del cuadro una vez estirado y montado en bastidor. Las medidas reales del lienzo son superiores para permitir su montaje. Firmada a mano por la parte trasera. Incluye certificado de autenticidad. Descripción obra “Voy a pasármelo bien” Técnica: acrílico, pigmentos, gesso, tempera, ceras, pastel, lápiz, pintura en spray, adhesivos, cinta... Soporte: lienzo Cuadro trabajado desde la improvisación libre. Action painting con música de Hombres G, Lou Reed y Nick Drake. El humanoide del futuro de la película Prometheus y la idea de un "Ingeniero" detrás de la creación del Universo, forman esta historia de pasado y de futuro. Presentado con una estética urbana, como un grafiti en una pared de una ciudad, donde la erosión y la suciedad van haciendo mella. Solo somos animales, pero hablamos con los Dioses. Cazamos y pintamos. Cultivamos y rezamos. Somos insignificantes y gigantes a la vez. Simples y mágicos. No somos nada o quizás lo único. Nosotros, que somos Naturaleza pero que nos hemos convertido en otra cosa. Pintura gestual, intuitiva, que deja que las cosas pasen y se apoya sobre lo que aparece. Aprovechando el accidente y aceptando las consecuencias. Lo desconocido, lo que se nos escapa entre los dedos.... Naturaleza, antigüedad, lo terrenal y lo espiritual. Necesidad de contar cosas, de dejar huella, de entender el mundo, que siempre es moderno y antiguo. Nada importa mucho... Trabajando con la mirada perdida...