Pere Danés Berga (1945) - Un día de caza

Pictura subastas presenta esta magnífica obra de arte de Danés Berga en la que se ve representado un día de caza. Se ve una cualidad pictórica muy destacable en la obra. Obra muy exclusiva del pintor.

· Las medidas de esta obra con marco son: 42,5x89x2 cm.
· Las medidas de esta obra sin marco son: 34x79 cm.
· Se trata de una acuarela firmada del pintor en el margen inferior derecho, Danés Berga.
· Esta pieza se encuentra en excelente estado.

La obra se vende con precioso marco (incluido en la subasta como regalo, se presenta con vidrio protector).

Procede de una colección privada de Girona.

El cuadro será perfectamente embalado por un profesional de IVEX y enviado por Correos o GLS con su código de seguimiento único. Envíos a todo el mundo.

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Este cuadro presenta una escena dinámica y cargada de acción en el corazón de un denso bosque. En el primer plano, podemos observar un grupo de jabalíes que irrumpen en la composición con energía y velocidad. Los jabalíes, con sus cuerpos robustos y pelaje oscuro, se mueven rápidamente a través de un claro del bosque, creando un sentido de urgencia y caos. Algunos de los animales parecen estar huyendo hacia el lado derecho de la pintura, mientras otros corren en diferentes direcciones, enfatizando aún más la sensación de desorden. La variedad de tamaños y colores en los jabalíes, desde marrones oscuros hasta tonos más claros, sugiere la presencia de varias generaciones de estos animales, incluidos algunos crías que corren junto a los adultos.
En contraste con la frenética estampida de los jabalíes, un cazador aparece en el extremo derecho del cuadro, semioculto detrás de un árbol. Está en una posición de ataque, con su rifle levantado y listo para disparar. Su postura tensa y decidida añade un elemento de tensión al cuadro, capturando un momento congelado en el tiempo justo antes de la acción inminente. La expresión del cazador no es visible, pero su cuerpo inclinado hacia adelante y la firmeza con la que sostiene el rifle sugieren concentración y determinación. Su ropa de camuflaje se mezcla con los verdes y marrones del bosque, haciendo que su figura se integre en el entorno natural.
El fondo del cuadro está dominado por altos árboles que se elevan hacia el cielo, sus troncos delgados y rectos creando un telón de fondo que añade profundidad a la escena. El juego de luces y sombras entre los árboles sugiere que es un día soleado, pero la luz se filtra a través del dosel del bosque de una manera que crea áreas de luz moteada en el suelo. El contraste entre las sombras oscuras y las áreas iluminadas aumenta la sensación de movimiento y velocidad de los jabalíes, así como la inminente confrontación entre el hombre y la naturaleza.
En conjunto, el cuadro transmite una intensa sensación de acción y suspense, atrapando al espectador en un momento crucial en el que la naturaleza y el ser humano están a punto de chocar. La combinación de elementos naturales y figuras humanas crea un fuerte contraste entre la vida salvaje y la intervención humana, haciendo de esta obra una poderosa representación del enfrentamiento entre la civilización y el mundo natural.