Escrito por Tom Flanagan | 18 de octubre de 2022
Las alfombras han existido durante miles de años y siguen siendo uno de los elementos más duraderos en cualquier hogar. Son algo originalmente para vestir el suelo y una manera fácil de arreglar toda una estancia, pero también son elementos sensatos a incorporar en cualquier espacio en el que importe la energía debido a su calidez y durabilidad. El experto en alfombras Richard Ebbers y la Gerente senior responsable de la categoría de interiores Anna Denise Floor prestan sus conocimientos para una guía esencial para decorar con alfombras.
Las alfombras son una característica habitual en casas de todo el mundo y hay buenos motivos para ello: son elegantes, variadas, suaves (en su mayoría) y cálidas. El atractivo de las alfombras será diferente para cada persona, pero es una constante.
“Las veo como obras de arte en el suelo”, dice Anna Denise Floor, Gerente senior responsable de la categoría de interiores. “Una alfombra es bonita, pero también es muy práctica y dura mucho tiempo. Puede dar a cualquier espacio una identidad y atmósfera claras”. Como dijo ‘The Dude’ de El gran Lebowski, “realmente puede arreglar el espacio”.
“Las alfombras también son algo agradable, especialmente en los meses más fríos. Con el calentamiento global y los precios del gas subiendo, una alfombra puede ayudarnos a aislar una habitación del frío y mantenerla caliente por más tiempo. No solo tus pies lo agradecerán, también lo harán tus facturas de energía y el planeta”.
Los orígenes de las alfombras
Las alfombras se remontan a la antigua Persia, aunque la alfombra más antigua del mundo sugiere que serían incluso anteriores. “La alfombra Pazyryk es la más antigua que se conoce en el mundo y ahora está expuesta en el Hermitage en San Petersburgo”, dice Richard. “Se encontró en una tumba en las montañas de Altai a finales de la década de 1940, pero, se anudó alrededor del año 500 a. e. c.”.
“De ningún modo era un diseño simple. La alfombra está finamente anudada —con unos 360 000 nudos por metro cuadrado—, con un bonito diseño geométrico. Como es ya una alfombra muy sofisticada, se puede asumir que las alfombras se llevan anudando mucho más tiempo. Pero poco se sabe al respecto. Aún no se han encontrado alfombras más antiguas”.
Avanzamos unos siglos hasta finales del siglo XIX y las alfombras persas causan sensación en París, que ya por entonces competía por el título de capital mundial del estilo.
“Las alfombras persas empezaron a aparecer en exposiciones mundiales como la de París. Y la gente se enamoró de estas obras de arte. Las alfombras hechas a mano se convirtieron en imprescindibles para la clase alta en Europa y más tarde en los EUA. Empresas europeas como Ziegler & Co. y Petag montaron sus propios talleres de alfombras en las ciudades persas de Tabriz y Arak. A partir de ese momento, las alfombras persas anudadas a mano (así como las turcas, chinas y armenias) se convirtieron en algo esencial en nuestros espacios interiores”.
Cómo elegir una alfombra
La razón de ser de las alfombras es aportar comodidad y embellecer una estancia, pero elegir una que sea adecuada es a menudo una deliberación. Richard explica que es cuestión de conocer tu espacio y tus gustos.
“No hay discusión sobre gustos y existe una gran variedad de opciones para satisfacer a cada uno. Pueden ser alfombras bereberes de pelo largo, kilim tejidas o alfombras de elegantes diseños modernos. Pregúntate qué queda bonito en tu casa. Es una pregunta que cada persona responderá de manera diferente. Mi consejo principal: empieza por el tamaño de la alfombra. Suena muy frío, lo sé, pero es muy importante, pues dictará el estilo de tu espacio y en qué medida quieres que tu habitación se vea guiada por la alfombra”.
“Para averiguar cómo de grande debe ser una alfombra, coloca periódicos viejos en el lugar en el que tienes pensado ponerla. De esta manera puedes ver cómo quedaría allí una alfombra de 3 x 2 metros. Y luego se trata de comprar algo de lo que te enamores. La primera elección es casi siempre buena”.
Tampoco necesitas limitarte a una alfombra. A menudo, tener varias es una excelente manera de llenar un espacio y hacer una mezcla con tu estilo. “Piensa en una bonita bereber gruesa para el invierno y una preciosa kilim para el verano. En muchos países se cambian las alfombras entre estaciones para hacer un uso óptimo del espacio. En verano no necesitas una cálida alfombra de lana; en Italia a menudo cambian estas alfombras por otras tejidas más ligeras y transpirables”.
“Además, plantéate usar alfombras para decorar estacionalmente, algo en lo que pocas personas piensan. Considera una roja clásica para las épocas festivas, una amarilla para la primavera y una alfombra con estampado general para todas las demás fiestas y celebraciones”.
Tipos de alfombras
Puede que no te hayas dado cuenta, pero hay distintas formas de fabricar alfombras. Pensemos, por ejemplo, en una kilim frente a una alfombra tradicional. Son dos opciones populares para muchos, pero a menudo se malinterpretan y representan artesanías distintivas por derecho propio. “Una alfombra se anuda, una kilim se teje”, dice Richard. “Una kilim no tiene pelo, por lo que es más fina. Y no tiene nada que ver con el lugar de origen”.
“Mucha gente piensa también que las kilim tienen un aspecto más moderno. Pero la técnica para tejer las kilim es más simple que la de anudar (una alfombra convencional es en realidad una kilim con una fila de nudos entre cada trama). Por lo tanto, se puede suponer que se hizo así antes y que las kilim son un tipo de alfombra más antiguo que las de pelo. Debido a la técnica utilizada, las kilim tienen generalmente diseños más geométricos. La técnica de tejido empleada hace que sea más difícil crear formas redondas”.
Más allá de esto están las alfombras bereberes, las nómadas y las de taller, dice Richard. “Las alfombras bereberes representan lo opuesto a las kilim; son alfombras del norte de África gruesas, de pelo largo y muy agradables. Luego tienes alfombras nómadas en oposición a alfombras de taller, como las Qashqai y las de Tabriz, respectivamente. Esta es, en mi opinión, la diferencia más importante en cuanto a alfombras”.
“Los artistas detrás de las alfombras nómadas son a menudo fabricantes talentosos. Usan solo sus propios materiales, imágenes de la vida cotidiana y el entorno para inspirarse. No hay dibujos de lo que quieren crear; la alfombra está en su mente”.
“En las alfombras de taller lo que importa es el diseñador. Todo está pensado. Un dibujo perfecto, los colores correctos, los materiales, el número correcto de nudos. Todo se mide a la perfección. Luego las anudan los artesanos con más experiencia”.
Materiales y diseño
Una vez más, no hay elecciones correctas o incorrectas cuando se trata de alfombras, pero hay algunos elementos como el material y el diseño que son algo importante a tener en cuenta a la hora de comprar.
“Creo que todo tiene que ser correcto”, dice Richard. “Buenos materiales, como buena lana y buenos tintes, un diseño bonito, la combinación de colores adecuada y un buen número de nudos por metro cuadrado para ajustarse al dibujo. Esto pasa a ser un poco técnico, así que pregúntale a la persona a la que le estás comprando. La alfombra debe estar cuidadosamente anudada y rematada. Además, debe permanecer plana, por lo que sin bultos ni remaches”.
“Pero resumiendo, todo lo anterior es irrelevante. Al final, creo que lo más importante es que cada vez que miras la alfombra, debería hacerte feliz. Tengo una antigua Heriz debajo de mi escritorio y me alegra cada día”.
Anna Denise está de acuerdo. “Para mí, lo importante en una alfombra es la comodidad y cómo vives un espacio. Aparte de cómo se ve, es una experiencia táctil. Piensa en los pies descalzos sobre una lana suave, por ejemplo. Pero también es algo que puede afectar realmente a la forma en que suena una habitación. No es algo en lo que la gente piense, pero sin alfombras (o arte para el caso), los espacios pueden sonar huecos y vacíos. Con una alfombra, los sonidos son más suaves y agradables”.
“En resumen: añadir una alfombra cambia la forma en que experimentas tu espacio visual, física y sonoramente. Piensa en esto cuando te plantees comprar una alfombra para tu casa: ¿qué espacios necesitan un poco más de suavidad en cualquiera de estos sentidos?”.
Cómo cuidar tu alfombra
Algo que a menudo se olvida pero que se pregunta mucho es exactamente cómo cuidar una alfombra. “El cuidado diario es fácil”, explica Richard. “Usa una aspiradora. Aspira con una boquilla lisa, sin cepillo. ¿Has derramado un líquido sobre ella? Seca la alfombra con papel de cocina blanco, toallas o algún paño que absorba el líquido. ¿La mancha se sigue viendo? Mójala con agua tibia y seca dando palmaditas. Y repite tantas veces como sea necesario”.
“Recomiendo llevar las alfombras a un buen limpiador de alfombras al cabo de varios años. Es normalmente pasados entre seis y ocho años, pero depende de la intensidad con la que se use una alfombra. La finalidad es asegurarse de que la alfombra esté libre de toda la suciedad que la aspiradora no pueda eliminar, y por si se necesitan pequeñas reparaciones”.
Las alfombras son un complemento maravilloso para cualquier hogar. Y como explica Richard, son un ejemplo fascinante de diseño que a menudo pasamos por alto y una razón para prestar atención al mundo bajo nuestros pies.
“En Irán casi todos los pueblos y ciudades tienen su propio tipo de alfombra. Las diferentes tribus tienen sus propias alfombras. Y con esto podemos decir que el mundo de las alfombras es increíblemente vasto y diverso. Todos los días ves algo nuevo y aprendes algo nuevo. Y así continuamente. Cada año, se inventan cosas nuevas, algo completamente nuevo, o se recupera algo del pasado y se le da un nuevo aspecto. Qué mundo tan fantástico”.
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