Lluís Domingo Abelló (1917) - Naturaleza en el interior

Pictura Subastas presenta esta magnífica obra de arte de Domingo Abelló en la que se ve representado un precioso bodegón. Se ve una calidad pictórica muy destacable en la obra. Obra muy exclusiva del pintor.

· Las medidas de esta obra sin marco son: 55x46x1 cm.
· Se trata de un óleo sobre tabla con la firma del pintor en el margen inferior derecho, Domingo Abelló.
· Esta pieza se encuentra en excelente estado.

Procede de una colección privada de Girona.

El cuadro será perfectamente embalado por un profesional de IVEX y enviado por Correos o GLS con su código de seguimiento único. Envíos a todo el mundo.

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Este cuadro nos presenta una escena interior sencilla pero llena de vida, donde una mesa sostiene un jarrón de flores que parece ser el centro de atención. Las flores, aunque delgadas y frágiles, se elevan con gracia, esparciendo pequeños toques de color en tonos amarillos y azules. A pesar de la simplicidad de las ramas, la composición logra transmitir una sensación de frescura y delicadeza, como si estas flores recién recogidas hubieran sido colocadas ahí con la intención de capturar un instante de belleza efímera.
El jarrón que contiene las flores es alargado y transparente, lo que permite que los colores del entorno se reflejen suavemente en su superficie. Detrás del jarrón, se percibe una pared de color verde claro, cuyas pinceladas visibles crean una textura que da profundidad al fondo y refuerza la idea de un espacio cálido y acogedor. La pared no es un simple telón de fondo; su tratamiento con pinceladas amplias y enérgicas aporta movimiento y vida, contrastando con la quietud de los objetos en primer plano.
En la mesa, se encuentran dos esferas que, por su apariencia, podrían ser frutas o elementos decorativos. Sus colores, uno en tonos rojizos y otro en verdes, añaden un contraste vibrante a la composición, atrayendo la mirada del espectador de manera sutil, pero sin desviar la atención del jarrón y las flores. Las sombras suaves que proyectan sobre la mesa sugieren una fuente de luz natural que ilumina la escena de manera indirecta, envolviendo los objetos en una atmósfera tranquila y serena.
Al fondo, en la pared, se vislumbra lo que parece ser una pintura enmarcada, aunque sus detalles son abstractos y difíciles de distinguir. No obstante, su presencia añade profundidad al espacio y refuerza la sensación de un ambiente doméstico y familiar. El conjunto de estos elementos crea una escena que, aunque cotidiana, transmite una sensación de calma y belleza, como si fuera un instante detenido en el tiempo, capturado en un día tranquilo y silencioso.
En conjunto, este cuadro nos invita a apreciar la belleza en la sencillez de los objetos cotidianos. Cada elemento, desde las flores hasta los colores del fondo, se combina para crear una sensación de equilibrio y armonía visual. A través de pinceladas sueltas y colores vivos, el artista logra transformar una escena interior común en una obra llena de vida y frescura.